domingo, 25 de abril de 2010

Lo malo también es bueno


(Basado en hechos reales)
Yo soy Jorge, tengo 10 años de edad y estoy en quinto de primaria. Tengo un par de problemas pero eso ha hecho que sea el más conocido del colegio y de los pueblos de mis abuelos. La gente no sabe que las cosas malas tampoco son tan malas, porque mi problemas hacen que en algunas cosas sea peor que los demás, pero en otras cosas yo soy mejor. Por ejemplo: yo soy el más lento de la clase corriendo pero soy el que se mantiene más rato a la pata coja y también el que tiene la pierna más dura. Alguna gente se mete conmigo por lo de tener la pierna más dura pero esos son los más tontos, y además eso es bueno porque si alguien me pega una patada a ellos les duele, a mi no. Tengo otro problema peor que ese, que hace que mientras juego con mis amigos tengo que parar un rato para comer y algunas veces cuando no puedo tragar me tienen que llevar al hospital, y cuando como un montón de comida me puedo quedar en coma, pero eso nunca me ha pasado y espero que no me pase. Deseo que descubran un remedio para esa enfermedad llamada diabetes, es la segunda que he dicho. Lo que no me explico es por qué a la gente le da por preguntarme, que pregunten a mi madre que es la que más sabe de este tema, yo sé muy poco, sé lo justo para mi edad. A los que se meten conmigo les digo que se pongan en mi lugar, a ver si aprenden de una vez esos catetos. Yo soy jugador de un equipo de baloncesto llamado Cordobasket Vistalegre. Juanma, un amigo, fue el que me convenció para que me uniera. Vamos muy bien, en la liga, segundos pero por poco tiempo. Yo tengo muchos amigos y amigas: Dani, Mariangeles, Paloma, Juanma, etc... Mis amigos, cuando vamos al parque quieren que vaya yo, porque así somos más jugadores en el equipo. En el colegio cuando nos peleamos nos perdonamos a los 5 minutos, eso es algo bueno pero lo malo es que hay muchas peleas y eso no nos gusta. Mi colegio es C.E.I.P. Enríquez Barrios donde nos han dado unos ordenadores y han puesto una pizarra digital, me gustan mucho y también comer. Mis padres dicen que tendré diabetes pero como más chuches que muchos de la clase. Esta historia no la he hecho para ganar el concurso de relatos, la escribo para que la gente no me pregunte sobre lo de la pierna ni lo de los diabetes, porque los libros no están hechos sólo para leer, están para aprender y, aunque no os guste esta historia, quiero que aprendáis que el cuerpo cada persona lo tiene diferente y las enfermedades también. Pero en lo que somos todos iguales es en el interior y esto es una historia que nunca olvidaré.
Jorge

0 comentarios:

Publicar un comentario