domingo, 25 de abril de 2010

Nunca lo olvidaré: Aquellas vacaciones


El día doce de Agosto me levanté muy ilusionada, porque nos íbamos de vacaciones a Málaga mis amigos y yo. El día anterior preparamos las maletas y por la mañana estábamos listos para viajar, fueron tres horas aproximadamente de viaje, pero para mí fueron interminables. Pasamos por Marbella, allí había unas casas grandísimas y preciosas, el único defecto que le vi a Marbella era que casi todos los habitantes eran ricos. Cuando llegamos a Málaga, nos metimos en el camping ( había mucha gente ) y tuvimos que esperar una hora, pero mientras que nuestros padres esperaban para entrar en el camping, nosotros fuimos a la playa que estaba a unos 20 metros de allí.

Nosotros les ayudamos a nuestros padres a montar los convertibles , ya era de noche y nos fuimos a la cama. ¡La playa de Málaga era preciosa!

Al día siguiente, por la mañana fuimos a dar una vuelta por el camping, y conocimos a dos hermanos muy simpáticos, que nos hicimos amigos. Esa tarde fuimos a las piscinas y después a la playa, a mí me ocurrió una desgracia, ¡Me picó una medusa! Pero a pesar de todo me lo pasé muy bien. También fuimos a un concierto de Enrique Bumburi y nos encantó, porque canta muy bien.

Al día siguiente era el último que estábamos allí y lo aprovechamos todo lo que pudimos jugando, pero tuvimos que recoger e irnos.

Después de otras tres horas de camino, ¡Por fin llegamos! Al llegar a casa tuve una sorpresa: Todos mis amigos me esperaban para celebrar mi fiesta de cumpleaños con regalos y gominolas. Yo me emocioné tanto que se me saltaron las lágrimas. Ese día nos lo pasamos genial, aunque cuando ya era de noche caí rendida en la cama. Pero se me olvidó una cosa ¡Abrir los regalos! Era una barbie, una muñeca, un estuche con colores, ropa y dinero de mis familiares.

Al día siguiente era el último día de vacaciones y tuve que hacer todas las tareas que me mandaron para el colegio. Nos tocaba decir lo que habíamos hecho en vacaciones, y todos mis compañeros dijeron que estuvieron metidos en sus casas aburridos. Pero cuando me tocó a mi dije: -Yo en mis vacaciones me lo he pasado muy bien. ¡NUNCA LO OLVIDARÉ!

Y esas fueron mis mejores vacaciones de verano. Ese día fui la niña más feliz del mundo entero.

Claudia Piñones

0 comentarios:

Publicar un comentario